El gobierno bonaerense lanzó la convocatoria para realizar una audiencia pública con el objetivo de definir el nuevo valor de la tarifa del agua que, en principio, sería desde mayo un 200 por ciento más cara y desde julio otro 50 más.

De acuerdo a la Resolución 232/24, la audiencia será el próximo 8 de abril en la sede central del Ministerio de Infraestructura provincial y está previsto que autoridades de la empresa concesionaria Aguas Bonaerenses S.A. (ABSA) presenten los fundamentos técnicos, financieros y jurídicos de la actualización tarifaria que pidieron.

Días atrás, ABSA adelantó que requerirá una suba del 250 por ciento, dividido en dos tramos: 200 a partir de mayo y 50 a partir de julio. En ese sentido, aseguraron que el incremento “resulta ser sensiblemente menor al necesario para compensar los costos emergentes de la prestación del servicio”.

El último ajuste de la empresa fue del 45,2 por ciento y terminó de aplicarse, en tramos, en abril del año pasado. No obstante, desde la última presentación de pedido de aumento de la empresa a fines de 2022 hasta esta nueva audiencia, la inflación fue del 369 por ciento.

Según el último balance cerrado (del año 2022) de la compañía, hay "un significativo resultado negativo" producto del "atraso tarifario existente".

"Los ingresos solamente cubren el 52 por ciento de los gastos de explotación y si se suma los de administración y de comercialización el grado de autosustentabilidad de la empresa alcanza a apenas el 40 por ciento. Por eso, aducen, que el equilibrio 2022 hubiera requerido un 90 por ciento de aumento de ingresos, algo que no se trasladó a la tarifa", detalló la prestataria.